Más de cuatro mil personas caminaron este sábado entre la cabecera y San Pedro Sacatepéquez, San Marcos, para conmemorar el 14 aniversario del asesinato del obispo Juan Gerardi.
Religiosos, sindicalistas, estudiantes y líderes comunitarios caminaron dos kilómetros entre ambas ciudades, con pancartas y cartulinas que evocaban la memoria monseñor Gerardi, asesinado el 26 de abril de 1998 en la casa parroquial de San Sebastián, en la capital guatemalteca.
Monseñor Álvaro Ramazzini, obispo de San Marcos, quien presidió la marcha, dijo que Gerardi es un mártir por recuperar la memoria histórica del conflicto armado interno, por lo cual fue asesinado.
Señaló que Gerardi logró la creación de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado (Odhag) para actuar contra la “violencia desenfrenada y cualquier violación de los derechos humanos”.
“Gerardi estaba convencido de que debemos vivir en paz mediante la reconciliación”, recordó Ramazzini.
El religioso expresó su preocupación por que la pobreza y la injusticia social las causas del conflicto armado interno que causó 200 mil muertes y duró 36 años en Guatemala, las cuales perduran hasta ahora.
Mientras tanto, en la Iglesia de San Sebastián, en la capital, se celebró una actividad ecuménica donde también se evocó la memoria del religioso.
El pueblo católico puede acudir a las catacumbas de la Catedral Metropolitana, en la 8 avenida entre 8 y 6 calle, para presenciar la tumba de Gerardi.
Prensa Libre, 21/04/12
Religiosos, sindicalistas, estudiantes y líderes comunitarios caminaron dos kilómetros entre ambas ciudades, con pancartas y cartulinas que evocaban la memoria monseñor Gerardi, asesinado el 26 de abril de 1998 en la casa parroquial de San Sebastián, en la capital guatemalteca.
Monseñor Álvaro Ramazzini, obispo de San Marcos, quien presidió la marcha, dijo que Gerardi es un mártir por recuperar la memoria histórica del conflicto armado interno, por lo cual fue asesinado.
Señaló que Gerardi logró la creación de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado (Odhag) para actuar contra la “violencia desenfrenada y cualquier violación de los derechos humanos”.
“Gerardi estaba convencido de que debemos vivir en paz mediante la reconciliación”, recordó Ramazzini.
El religioso expresó su preocupación por que la pobreza y la injusticia social las causas del conflicto armado interno que causó 200 mil muertes y duró 36 años en Guatemala, las cuales perduran hasta ahora.
Mientras tanto, en la Iglesia de San Sebastián, en la capital, se celebró una actividad ecuménica donde también se evocó la memoria del religioso.
El pueblo católico puede acudir a las catacumbas de la Catedral Metropolitana, en la 8 avenida entre 8 y 6 calle, para presenciar la tumba de Gerardi.
Prensa Libre, 21/04/12
