Un estudio presentado por investigadores de Salud Ambiental de la Universidad de Michigan, EEUU, por parte de la organización Physicians for Human Rights, dice que en las muestras de sangre y orina tomadas a un grupo de habitantes de las áreas más cercanas a la Mina Marlín, se encontraron niveles de metales que pueden ser tóxicos y que con el tiempo podrían estar en mayor cantidad, poniendo en peligro la salud de los habitantes y el medio ambiente.
Este estudio también confirma los resultados de los dos últimos informes realizados por la Comisión Pastoral Paz y Ecología –COPAE-, los cuales muestran la presencia de metales en las aguas de los ríos Tzalá y Quivichil, y en algunos meses del año, en cantidades altas, dando como resultado que dichas aguas no sean aptas para el uso de las poblaciones.
Los expertos norteamericanos dicen que la situación es preocupante, ya que la Mina Marlin apenas llevaba cuatro años en el momento que la investigación fue realizada. También mencionan que en pasadas investigaciones realizadas a través del mundo, los efectos de minería solo van incrementando con el tiempo. Por eso advirtieron que se espera que esta contaminación se incremente en el futuro, y que estos efectos podrían durar durante muchos años.
Los habitantes de las comunidades así como las demás formas de vida que se encuentran alrededor de la mina marlín continúan en alto riesgo de contaminación lo cual viola los derechos humanos, a un ambiente sano, al derecho al agua y la alimentación entre otros.
Los resultados de este estudio son muy importantes porque se trata del primer estudio sobre la salud de los pobladores alrededor de la Mina Marlin. Además, el estudio se hizo por expertos internacionales con los métodos de investigación más avanzados. Sin embargo, fue un estudio de corto alcance, ya que los investigadores hicieron su estudio en una sola semana y la participación de los pobladores fue reducida. Además, no había participación de niños, que son los más vulnerables por los efectos de metales pesados.
Por eso, el objetivo de los investigadores era estudiar si había razones para preocuparse en el área de la Mina Marlin y de establecer una línea base de datos que es muy importante para seguir investigando.
Al final del estudio se logró concluir que la situación es bastante preocupante, y que la necesidad de realizar investigaciones más amplias y de una mayor duración, es imperativa. También enfatizaron la responsabilidad que el gobierno de Guatemala tiene para proteger la salud de todos los guatemaltecos.
RECOMENDACIONES DEL ESTUDIO
• Que se realice más estudios de salud, con más personas y a largo plazo.
• Poner mucha atención en la salud de los niños, porque son los que más pueden sufrir con la presencia de contaminantes en el ambiente.
• Realizar un amplio estudio ecológico para poder evaluar la calidad del ambiente, el cual tiene que durar muchos años.
• Que se forme un Grupo de Supervisión Independiente, que pueda orientar de forma experta sobre los daños y los beneficios que trae la mina Marlin a la Salud Humana, el ambiente, las relaciones entre los habitantes de la comunidades y la economía.
COPAE 14/06/2010
