Lejos de mejorar, la violencia y la situación de los Derechos Humanos en Guatemala sólo empeoran. La constatación es del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), que divulgó un informe con datos del mes de noviembre para llamar la atención de la opinión pública nacional e internacional. El informe alerta sobre el hecho de que la violencia ha crecido un 3,3% en relación con los 11 meses del año anterior.
De acuerdo con el GAM, en diez años de impunidad y violencia más de 53 mil personas perdieron la vida, cifra que supera las muertes ocurridas en 36 años de guerra civil. Otro dato que revela la situación del país es el aumento de la violencia y crueldad de los delitos contra las mujeres. En 2011, los índices de actos violentos contra ellas también subieron. Las informaciones son un alerta para la puesta en práctica de acciones integrales que puedan cohibir la criminalidad.
El informe del GAN muestra que el sábado y el domingo en Guatemala no son días de ocio y descanso, sino de miedo. El fin de semana es señalado como el período más peligroso de la semana. Hasta el mes de octubre, el promedio es de seis personas muertas por fin de semana.
El índice de muertes violentas también asusta, porque en lugar de disminuir, aumentó 3,051. Hay también especulaciones de que el número sea bastante mayor, ya que los datos sobre muertes violentas son tomados de los medios de comunicación. Basado en datos del Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala (Inacif), se cree que el aumento haya sido de 5,679. La actual tasa de homicidios del país, según el GAM, es de 38,6 muertes cada 100 mil habitantes.
Las armas de fuego continúan siendo los principales instrumentos causantes de las muertes en el país. El 86,2% de las muertes violentas fueron provocadas por estas armas, mientras que las armas blancas fueron responsables del 5,51% de los casos y las golpizas victimaron al 4,0%.
Las masacres también son motivo de preocupación, pues generalmente terminan en la impunidad. El GAM comenzó a monitorear este tipo de casos en virtud de la recurrencia y de la gran cantidad de personas inocentes muertas en sólo un acto delictivo. En noviembre, el número de víctimas de masacres subió a 49; de éstos, 36 murieron durante una acción violenta, y 13 quedaron heridos.
El GAM también relata que los que más sufren por la violencia son las poblaciones de la ciudad de Guatemala, Villa Nueva y Mixco. En estos municipios se registraron las mayores cantidades de víctimas: 722, 186 y 171, respectivamente. Inclusive la presencia de comisarías modelo no logra cohibir la criminalidad en las regiones.
En contrapartida, los municipios de San Pedro Sacatepéquez (8 víctimas), Fraijanes (5) y San Raimundo (2) fueron considerados los menos violentos y los que produjeron la menor cantidad de víctimas fatales.
En relación con las profesiones de mayor riesgo, la de conductor de ómnibus –considerada la más vulnerable en los últimos tres años- salió del tope y dio lugar a la de comerciante. 113 profesionales de este ramo fueron muertos. Las estadísticas también reportan en el segundo y tercer lugar las profesiones de conductor de transporte de colectivo (84) y de agricultor (64).
La violencia contra la mujer también necesita ser recordada, porque según el GAM, ellas "siguen siendo las víctimas por excelencia en todos los ámbitos”. Este año, las envestidas violentas contra las mujeres aumentaron un 2% si se compara con datos de 2010. Esto muestra la necesidad de dar más atención a los delitos cometidos contra ellas y no sólo a los llamados delitos comunes, sino también a los relacionados con la violencia intrafamiliar.
Adital, 16/12/2011
De acuerdo con el GAM, en diez años de impunidad y violencia más de 53 mil personas perdieron la vida, cifra que supera las muertes ocurridas en 36 años de guerra civil. Otro dato que revela la situación del país es el aumento de la violencia y crueldad de los delitos contra las mujeres. En 2011, los índices de actos violentos contra ellas también subieron. Las informaciones son un alerta para la puesta en práctica de acciones integrales que puedan cohibir la criminalidad.
El informe del GAN muestra que el sábado y el domingo en Guatemala no son días de ocio y descanso, sino de miedo. El fin de semana es señalado como el período más peligroso de la semana. Hasta el mes de octubre, el promedio es de seis personas muertas por fin de semana.
El índice de muertes violentas también asusta, porque en lugar de disminuir, aumentó 3,051. Hay también especulaciones de que el número sea bastante mayor, ya que los datos sobre muertes violentas son tomados de los medios de comunicación. Basado en datos del Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala (Inacif), se cree que el aumento haya sido de 5,679. La actual tasa de homicidios del país, según el GAM, es de 38,6 muertes cada 100 mil habitantes.
Las armas de fuego continúan siendo los principales instrumentos causantes de las muertes en el país. El 86,2% de las muertes violentas fueron provocadas por estas armas, mientras que las armas blancas fueron responsables del 5,51% de los casos y las golpizas victimaron al 4,0%.
Las masacres también son motivo de preocupación, pues generalmente terminan en la impunidad. El GAM comenzó a monitorear este tipo de casos en virtud de la recurrencia y de la gran cantidad de personas inocentes muertas en sólo un acto delictivo. En noviembre, el número de víctimas de masacres subió a 49; de éstos, 36 murieron durante una acción violenta, y 13 quedaron heridos.
El GAM también relata que los que más sufren por la violencia son las poblaciones de la ciudad de Guatemala, Villa Nueva y Mixco. En estos municipios se registraron las mayores cantidades de víctimas: 722, 186 y 171, respectivamente. Inclusive la presencia de comisarías modelo no logra cohibir la criminalidad en las regiones.
En contrapartida, los municipios de San Pedro Sacatepéquez (8 víctimas), Fraijanes (5) y San Raimundo (2) fueron considerados los menos violentos y los que produjeron la menor cantidad de víctimas fatales.
En relación con las profesiones de mayor riesgo, la de conductor de ómnibus –considerada la más vulnerable en los últimos tres años- salió del tope y dio lugar a la de comerciante. 113 profesionales de este ramo fueron muertos. Las estadísticas también reportan en el segundo y tercer lugar las profesiones de conductor de transporte de colectivo (84) y de agricultor (64).
La violencia contra la mujer también necesita ser recordada, porque según el GAM, ellas "siguen siendo las víctimas por excelencia en todos los ámbitos”. Este año, las envestidas violentas contra las mujeres aumentaron un 2% si se compara con datos de 2010. Esto muestra la necesidad de dar más atención a los delitos cometidos contra ellas y no sólo a los llamados delitos comunes, sino también a los relacionados con la violencia intrafamiliar.
Adital, 16/12/2011
