domenica 16 gennaio 2011
370 - GUATEMALTECAS FUERON ESTERILIZADAS SIN SU CONSENTIMIENTO
En 1974, en el hospital general San Juan de Dios, financiados por la organización internacional Population Council, hubo experimentos de esterilización en mujeres guatemaltecas, les ofrecieron atención médica gratuita y nunca les informaron de lo que se les hacía.
Mujeres guatemaltecas fueron utilizadas para hacer experimentos de esterilización química durante la década de los setenta, de acuerdo con información obtenida por el matutino elPeriódico, la cual se consigna en el informe “Del Control de la Natalidad al Genocidio”, elaborado por el médico español Alfredo Embid, coordinador de la Asociación de Medicina Alternativa de España.
Debido a esa situación más de 50 mujeres en edad fértil jamás quedaron embarazadas o, en algunos casos, nunca tuvieron hijos, se lee en el documento. Embid explica que las mujeres nunca dieron su consentimiento para que se hicieran experimentos con ellas y asegura que las engañaron.
En 1974, en el hospital general San Juan de Dios, con ayuda financiera de la organización internacional Population Council, se hicieron experimentos de esterilización en guatemaltecas, a quienes habían motivado con la promesa de una atención médica gratuita.
Estas prácticas atroces no eran realizadas solo como experimentos; en el informe se consigna que eran políticas implementadas por Estados Unidos en países del tercer mundo; no les preguntaban a las mujeres si estaban de acuerdo, sino que se les hacía la práctica con engaños o, en otros casos, se les condicionaba la ayuda que los organismos internacionales brindaban.
Según la documentación, el procedimiento se hizo por medio de la esterilización química, la cual consistía en inyectar en el útero un fármaco denominado paraformaldehído, el cual produce una grave inflamación del endometrio que llega a bloquear la entrada de las trompas de Falopio.
En ese proceso se les extraía el útero a diferentes intervalos para ir observando clínico-patológicamente el avance de la cicatrización y comprobar el éxito de la esterilización, sin que las pacientes tuvieran conocimiento de lo que realmente se les hacía, se lee en el documento.
Esta fue una práctica impuesta en varios países en desarrollo con el propósito de controlar la natalidad; sin embargo, lo que muchos desconocen es la forma cruel con que fueron hechas estas pruebas que dejaron a muchas mujeres estériles.
El matutino se contactó con el médico Alfredo Embid, quien manifestó que tiene conocimientos de los casos de Guatemala gracias a informes que ha recopilado. Agregó que “este tipo de experimentos no es algo nuevo, se dieron desde el siglo pasado en varios países y agrega que los casos lamentablemente quedaron impunes”.
Expresó que “los peores casos de los cuales tiene conocimiento fueron los llevados a cabo en Filipinas y que lejos de condenar a los médicos que realizaron ese tipo de experimentos, fueron llevados a Estados Unidos para protegerlos”.
Guatemala no cuenta con una ley que tipifique como delito el uso de humanos para experimentos; sin embargo, la Corte penal internacional habla de que la esterilización forzada es considerada “crimen de lesa humanidad”.
Centro de Estudios de Guatemala 22 diciembre – 3 enero de 2011