Líderes provenientes de comunidades de San Marcos, El Progreso, Sololá y Quiché, se reunieron en el marco del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, en el municipio de San José del Golfo, en donde discutieron problemas que les aquejan, entre ellos la minería.
Leopoldo Méndez, de la Coordinación y Convergencia Nacional Maya Wakib’ Kej señaló que actualmente existe un reconocimiento de estos pueblos, que se remonta a una lucha de más de 40 años.
Sin embargo, para Méndez el reconocimiento de estos pueblos debe derivarse en el respeto a sus recursos naturales, a los que le dan un gran valor; por eso en esta ocasión manifestamos nuestro rechazo a la minería, el gobierno no solo tiene que velar por los intereses de empresas transnacionales y nacionales, señaló.
Según Méndez, los pueblos indígenas buscan el “buen vivir” basándose en los conocimientos que han heredado por siglos; las actividades extractivas van en contra de esa línea, dijo.
Por otro lado, Méndez reconoció que no solo los indígenas son afectados por estos proyectos, como es el caso de los pobladores de San José del Golfo y San Pedro Ayampuc, quienes en su mayoría no pertenecen a ninguna etnia maya.
En el encuentro realizado en San José del Golfo se reunieron líderes de todo el país hubo representantes de San Antonio La Paz, El Progreso; San Miguel Ixtahuacán, San Marcos; Uspantán, Ixcán, Chajul y Cotzal, de Quiché y Santa Bárbara de Huehuetenango, quienes intercambiaron sus experiencias frente a las actividades extractivas.
José Ángel Llamas, del Frente Norte del Área Metropolitana (FRENAM), una organización formada por vecinos de San José del Golfo y San Pedro Ayampuc, indicó que el principal problema en esos municipios es la minería, debido a que una empresa transnacional ha querido ingresar por la fuerza.
Desde hace cinco meses los vecinos han impedido el ingreso de una minera local, filial de la canadiense Radius Gold Inc.; sin embargo, al tratar de evitar su ingreso varios vecinos han sido objeto de intimidación por medio de llamadas amenazantes.
El ataque más grave se produjo en contra de Yolanda Oquelí, una de las lideresas de FRENAM que sufrió un ataque armado en julio, al que sobrevivió.
Representantes del Centro para la Acción Legal en Derechos Humanos (CALDH) denunciaron que las violaciones a los derechos de los pueblos indígenas continúan en el país, en donde han registrado por lo menos unos 250 conflictos derivados de actividades mineras pero también por hidroeléctricas y siembras de monocultivo.
José Roberto Morales, del Programa de Pueblos Indígenas de esa entidad, considera que los conflictos se originan por la ausencia de un instrumento que favorezca las consultas comunitarias y a que el Estado no informa previamente a estas comunidades, en base al Convenio 169 de la OIT; al no respetar eso, se violan sus derechos, agregó.
Centro de Estudios de Guatemala, 7-13 agosto de 2012
Leopoldo Méndez, de la Coordinación y Convergencia Nacional Maya Wakib’ Kej señaló que actualmente existe un reconocimiento de estos pueblos, que se remonta a una lucha de más de 40 años.
Sin embargo, para Méndez el reconocimiento de estos pueblos debe derivarse en el respeto a sus recursos naturales, a los que le dan un gran valor; por eso en esta ocasión manifestamos nuestro rechazo a la minería, el gobierno no solo tiene que velar por los intereses de empresas transnacionales y nacionales, señaló.
Según Méndez, los pueblos indígenas buscan el “buen vivir” basándose en los conocimientos que han heredado por siglos; las actividades extractivas van en contra de esa línea, dijo.
Por otro lado, Méndez reconoció que no solo los indígenas son afectados por estos proyectos, como es el caso de los pobladores de San José del Golfo y San Pedro Ayampuc, quienes en su mayoría no pertenecen a ninguna etnia maya.
En el encuentro realizado en San José del Golfo se reunieron líderes de todo el país hubo representantes de San Antonio La Paz, El Progreso; San Miguel Ixtahuacán, San Marcos; Uspantán, Ixcán, Chajul y Cotzal, de Quiché y Santa Bárbara de Huehuetenango, quienes intercambiaron sus experiencias frente a las actividades extractivas.
José Ángel Llamas, del Frente Norte del Área Metropolitana (FRENAM), una organización formada por vecinos de San José del Golfo y San Pedro Ayampuc, indicó que el principal problema en esos municipios es la minería, debido a que una empresa transnacional ha querido ingresar por la fuerza.
Desde hace cinco meses los vecinos han impedido el ingreso de una minera local, filial de la canadiense Radius Gold Inc.; sin embargo, al tratar de evitar su ingreso varios vecinos han sido objeto de intimidación por medio de llamadas amenazantes.
El ataque más grave se produjo en contra de Yolanda Oquelí, una de las lideresas de FRENAM que sufrió un ataque armado en julio, al que sobrevivió.
Representantes del Centro para la Acción Legal en Derechos Humanos (CALDH) denunciaron que las violaciones a los derechos de los pueblos indígenas continúan en el país, en donde han registrado por lo menos unos 250 conflictos derivados de actividades mineras pero también por hidroeléctricas y siembras de monocultivo.
José Roberto Morales, del Programa de Pueblos Indígenas de esa entidad, considera que los conflictos se originan por la ausencia de un instrumento que favorezca las consultas comunitarias y a que el Estado no informa previamente a estas comunidades, en base al Convenio 169 de la OIT; al no respetar eso, se violan sus derechos, agregó.
Centro de Estudios de Guatemala, 7-13 agosto de 2012
